martes, 17 de abril de 2012

BRASA DE FUEGO ETERNO O CANTO DEL CISNE



El pasado domingo, día 15 de abril, la castellana ciudad de Segovia acogía el XIV Homenaje a Juan Bravo y los comuneros segovianos. Al igual que Juan de Zapata y sus comuneros madrileños, un puñado de castellanistas madrileños subimos hasta la ciudad del Eresma.

Día frío, ventoso.

Y una sensación, una certeza. Somos la última trinchera, el último dique antes de que el olvido deliberado y el genocidio cultural destruyan nuestra identidad, nuestras raíces, nuestra cultura, nuestra Historia.

Somos la brasa que puede hacer que el fuego eterno de nuestro pueblo no se apague.

O el "Canto del Cisne".

Mientras nuestro corazón lata, lucharemos. Pero si las nuevas generaciones no nos dan el relevo, si nuestro pueblo pierde su voluntad de existencia, se perderá en la marea de la globalización y la homogenización.


CASTILLA, DESPIERTA O MUERE

1 comentario:

  1. elijo ser la brasa, por su puesto ... y daremos la brasa ;-)

    A mi no me van a callar ni debajo del agua.

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